El teletrabajo en tiempos del coronavirus: ¿una oportunidad para impulsarlo?
Roberto Martínez - Experto en Conciliación
Vida Laboral / 4 mayo 2020
El cierre de guarderías, colegios y universidades o las recomendaciones de las empresas de trabajar en remoto como medidas de prevención ante el Covid19, ha obligado a miles de españoles a teletrabajar desde sus hogares. Sin ninguna duda, la conciliación y la flexibilidad laboral son las mejores aliadas para hacer frente a este tipo de situaciones, pero vivimos en un país donde apenas existe esta cultura.
La segunda edición del Libro Blanco del Teletrabajo, impulsado por Fundación Másfamilia, muestra cómo tan sólo un 6,7% de personas realizan teletrabajo en España y sólo un 13% de empresas apuestan por el teletrabajo.
La situación actual provocada por la irrupción del Coronavirus ha sacado a la luz una división en el mundo empresarial. Por un lado, encontramos los que no confían en la flexibilidad ni el trabajo y se siguen refugiando en el presentismo y los que sí creen en las nuevas formas de trabajar y ayudan a dejar atrás esa costumbre del presentismo.
Desde nuestra experiencia gestionando la conciliación, a través del Certificado efr, junto a más de 750 entidades en 20 países, estamos convencidos de que el teletrabajo no se puede improvisar. Por esta razón, ofrecemos de la mano de nuestro director, Roberto Martínez, una guía para empresas y siete recomendaciones para que la productividad de nuestro trabajo no se vea afectada:
- Conoce si las tareas/ actividades programadas son las que realmente precisa tu organización. No procrastines. Estamos viendo que, parte por temor o inexperiencia, la gente se lanza al teletrabajo y a realizar tareas que no se saben si son las adecuadas. Por eso hay que hacer un trabajo previo en comprobar cuáles son las necesidades de la organización. Debemos saber si nuestro trabajo está alineado a los objetivos que se persiguen.
- Genera rutinas saludables (limpieza corporal, alimentación, vestimenta). Las personas que ya tienen experiencia con el trabajo en remoto han incorporado de manera progresiva nuevas rutinas, pero los trabajadores que se enfrentan por primera vez al teletrabajo se encuentran con una realidad completamente desconocida. Por eso, es importante cuidarnos física y mentalmente.
- Comienza pronto y termina… pronto. Ir por delante de los acontecimientos es una ventaja. Es importante coger una rutina y obligarnos porque podríamos correr el riesgo de que la procrastinación pueda con nosotros. También es importante ponernos una hora de finalización, es decir, debemos desarrollar una disciplina horaria para saber parar y saber desconectar.
- Establece pausas. Tu cerebro lo agradecerá. 10-15´cada 2 o 3 horas. Si en la oficina somos conscientes que debemos parar y hacer pausas para descansar, el trabajar desde casa no debe modificar esa costumbre. No somos máquinas, no podemos pretender estar 7 u 8 horas de manera continuada en el trabajo.
- Tu familia y tu entorno debe conocer que estás teletrabajando y no pasando el rato o de vacaciones. Estamos trabajando a distancia. Debemos sensibilizar a nuestro entorno que nos encontramos dentro de nuestra jornada laboral y que no se nos puede entretener aunque nos encontremos en un espacio físico común.
- Planifica reuniones con tu telejefe o telecompañeros con varios días de antelación. Es necesario anticiparnos en estos momentos. Hay que anticiparse porque en el teletrabajo no tenemos las cosas a nuestro alcance. Desde nuestra experiencia, creemos importante dedicar un tiempo previo a la planificación semanal para saber qué necesitas, qué vas a hacer…
- Los teletrabajadores también se desconectan y tienen vida privada. Los márgenes pueden desdibujarse pero no desaparecen. Define tus límites. Cómo hemos mencionado antes, hay que desconectar. Este nuevo entorno distinto que nos ofrece el teletrabajo nos puede llevar a otros tipos de rutina como extender ilimitadamente la jornada laboral. Hay límites que tenemos que respetar. El teletrabajador debe tener una vida plena, no es un trabajador dependiente.
Publicado en el Blog de la fundación Masfamilia.